DESAPARECIDO POLÍTICO DE LA IV REPÚBLICA

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sábado, 4 de enero de 2020

La Espada Gloriosa de Francisco del Carmen de la Trinidad Carvajal, Tigre Encaramado


 La Espada Gloriosa de Francisco del Carmen de la Trinidad Carvajal, Tigre Encaramado

La Espada, símbolo de libertad, de guerra, de lucha y virtud, en lo divino
presta para la batalla del héroe erguido u honorífica para el caído
ante ella jura lealtad, honra y gloria, el hombre ilustre, el sabio,  
el noble y el valiente, cuando defiende su orgullo  

En la victoria o la derrota, en guerra o paz, aun en insoria  
se ufana el guerrero, de pasión por logros, del amor   
propio de la dignidad  y el honor  
que aspiran los conductores de pueblos  para la conquista de su gloria.

Desde Alejandro, Cesar, Napoleón y Bolívar,  la usaron como el arma
don de mando, que enaltece o castiga
y a su vez fortalece el ego por los triunfos  
en lides libradas como gladiadores imperecederos  

Ya en mi pueblo, la radiante Aragua de Barcelona, “Atenas de Oriente”, recogida del suelo, cuando
en gesto fiero, bravío, Francisco del Carmen de la Trinidad Carvajal, cual Ricaurte en San Mateo,
dejó caer su espada y lanzas para tomar un cañón y evitar que cayera en bando enemigo
y el Libertador Bolívar honró su gesto post morten: reconocimiento eterno a Tigre Encaramado.  

Es obligación luchar por llevar al Panteón Nacional  
a Francisco del Carmen de la Trinidad Carvajal,  
y dar cumplimiento al decreto del General Guzmán Blanco:  
al Altar de la Patria los Próceres de la Independencia, entre ellos Tigre Encaramado.

Omar José Hernández Borges
omarhdez78.blogspot.com
                  01/01/2020

El 27 de marzo de 1874, el Gral. Antonio Guzmán Blanco firma el Decreto N° 43, en el que convierte la Iglesia Santísima Trinidad de Caracas en Panteón Nacional  y el 11 de febrero de 1876, luego de un reacondicionamiento, ordena trasladar al Panteón Nacional, que el mismo mando a reconstruir, los restos de los Próceres de la Independencia.

                                                      

LA GLORIOSA ESPADA DE FRANCISCO CARVAJAL







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