Acciones audaces: son
actos REVOLUCIONARIOS
Fuerza revolucionaria y espiritual:
En este primer aparte voy a decirle a los compatriotas
venezolanos, tal como lo refiere Diosdado Cabello, cuando él se siente un poco
decaído, va al Cuartel de la Montaña y sale fortalecido, al recordar las
acciones, ideas y esfuerzos que realizó Chávez para llevar adelante una Revolución
al servicio del pueblo.
Así mismo digo, cada
vez que veo las nubes oscuras, por situaciones en donde asaltan las dudas por
el no hacer, el no poder, la lenidad
ante los especuladores, la inflación inducida, los bachaqueros, la no
aceptación de la moneda en sus denominaciones pequeñas y todos los desmanes que
emplea la oposición apara afectar a la población, entonces apelo al pensamiento
de Miguel de Unamuno: "Jamás
desesperes, aún estando en las más sombrías aflicciones, pues de las nubes
negras cae agua limpia y fecundante", es como decir “Dios Proveerá”.
No pierdo la fe en Dios y su hijo Cristo, cuando éste en
actos revolucionarios salió a redimir a los pobres de su tiempo. No hablo de la
fe en las iglesias, porque estas son instrumentos de dominación, me refiero a no
perder la fe en el hombre, no hablo del individuo sino de la humanidad, del
colectivo con sus poderes creadores, el cual logra que se mantenga su esfuerzo,
su lucha, es decir, el que actúa como columna vertebral de un país libre,
independiente y soberano, y sobre todo decide quién debe gobernar en la patria
de Bolívar.
Ver a tantos compatriotas marchar, es la fuerza vital que nos
dejo Chávez, ahí está su presencia y es el mensaje para Venezuela y el mundo,
para afrontar las situaciones difíciles que presenten los poderes imperiales.
Antes de Chávez, en la IV República, nadie marchaba espontáneamente, a las
gentes las llevaban obligadas y en algunas circunstancias las comprometían con
un “bollo y una botellita de ron”
Marcha con el pueblo y los líderes de la revolución:
En mi caso particular, soy de los que toman la fuerza cada
vez que voy a una marcha de los compatriotas que apoyan a la Revolución
Bolivariana. Me paro hora y media o dos horas, siempre lo hago así, hoy fue en
Parque Carabobo, Av. México, Caracas, a ver pasar las marchas, una marea humana
que se desplaza con sus cánticos, consignas y demás manifestaciones culturales,
como siempre se expresa, es una fiesta del pueblo, donde se conversa de todo.
Luego de pasado ese tiempo me incorporo para ir con mi pueblo a acompañarlos, en esta
oportunidad fue hasta la sede del Ministerio del Poder Popular para las Relaciones
Exteriores (MRE) con la finalidad de estar presente y oír los discursos en este
día histórico de la salida de Venezuela de la Organización de Estados
Americanos (OEA), el Ministerio de las Colonias como la bautizó en su momento
Fidel Castro.
Música
maestro:
Profunda emoción sentimos cuando oímos a “Los Guaraguaos”
cantar un son cubano: La Salida de la OEA, del cantante cubano Carlos Puebla. Recordé los tiempos de las
elecciones de la Federación de Centros Universitarios en las instalaciones de la
Universidad de Carabobo, en Bárbula, cuando ese grupo musical asistió a esa
actividad político-cultural a cantar a finales de los 70´ en la Av. entre la
Facultad de Ingeniería y la Facultad de Medicina, tenían pegada, como se dice
en el argot musical, la ya famosa canción de Alí Primera: Las Casas de Cartón.
Están más vigentes que nunca.
Economía
revolucionaria:
Los actos revolucionarios son movimientos audaces para
lograr objetivos que vayan en beneficio del pueblo marginado de siempre, al que
siempre atropellan y afectan en todos los sentidos, lo han debilitado tanto que
su capacidad de aguante se resiente cada día mas. La guerra económica declarada
y “en escena” ha cobrado victimas tal como lo ha demostrado el canciller Jorge
Arreaza y el representante venezolano en la oprobiosa OEA, Samuel Moncada.
Los poderes imperiales y las oligarquías criollas tiemblan
ante esos sucesos, tal como lo hicieron durante la rebelión popular del 27 y 28
de febrero de 1989, la rebelión militar de Hugo Chávez el 04 de febrero de 1992
y ahora en el llamado de Nicolás Maduro, el 14 de abril de 2019, a las Unidades Populares
de Defensa Integral de la Milicia a incorporarse a la producción de
alimentos en los 51.743 donde tienen presencia en el país. Eso los ha mortificado, porque sus ganancias
provienen de la explotación del pueblo y de la especulación. Ese va a ser el golpe
mortal a las mafias de la agricultura.
Este acto revolucionario puede
parar un poco más a los especuladores, porque estamos viendo a los revendedores
encarecer los productos agrícolas de forma alarmante. Por ejemplo, un cartón de
huevos en Bs. 20.000,00, un kg de queso en Bs. 17.000,00, un kg de café en Bs. 16.000,00.
Es la locura desatada. En el mercado irregular de Pérez Bonalde, en Catia, los comerciantes
informales corren de un lado para otro con cajas de huevos sobre los hombros. Se
estacionan vehículos en las calles de esa comunidad con cantidades de cajas de
huevos y las venden a como les da la gana, afectando o distorsionando la comercialización
de ese producto. La gran pregunta es quiénes están controlando a las
productoras avícolas, quiénes les dan financiamiento y en donde están las
explicaciones técnicas de las estructuras de costos.
Si es el estado venezolano el que
las está financiando a través de la banca estatal, entonces se tiene que poner
orden en ese asunto, porque no puede ser que cada día los productos
alimenticios tengan precios diferentes, si no han ocurrido catástrofes en esos
sectores de la producción que lo
justifique. Entendemos que eso es producto del ataque a la moneda y a los
bolsillos de los venezolanos, pero se deben tomar algunas medidas que le den un
respiro a la situación económica por la que atraviesa el pueblo.
La medida de ajuste
de sueldos y salarios, sin que se tenga un control en los precios de los
productos de primera necesidad, somete esa reivindicación social al círculo
vicioso de incremento de salarios – alza de precios, convirtiendo en sal y agua
el acto de protección de los trabajadores. omarhdez78.blogspot.com
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